Si pensamos en los considerados “mejores momentos” que vivimos en un año o incluso durante toda nuestra vida, son realmente muy pocos: bodas, cumpleaños, Navidades… ¿Cuántos te salen? ¿Veinte o treinta en TODA la vida?

Las celebraciones son momentos planificados y se resumen en muy pocos, esperamos grandes ocasiones para unos instantes de felicidad… ¡Y eso el cuerpo lo nota! ¿Y si dejamos las grandes ocasiones y le damos la importancia que merecen a los pequeños momentos?

Cuando disfrutamos, nuestro cerebro libera endorfinas, dopamina y serotonina, las hormonas de la felicidad, esas que nos provocan emociones indescriptibles y sensaciones únicas y muchas veces irrepetibles… ¿Te imaginas poderlas liberar a tu antojo?

Everyday Extraordinary es eso, es abrir una botella de espumoso cuando te apetezca, no solo para celebrar ocasiones concretas, sino para transformar pequeños momentos que pasan sin darnos cuenta en ¡momentos extraordinarios!

No esperes más para disfrutar con los tuyos de una tarde cualquiera en casa, de una comida un día entre semana para desconectar o de esos ratitos cuotidianos con la pareja… porque lo bueno de convertir pequeños instantes en grandes momentos es que únicamente dependen de ti.